Capítulo 3
Una vez reunidos en «concilio» los ultraterrestres, estas grandes mentes del Cosmos dialogaron y meditaron sobre las razones del estancamiento evolutivo; uno de ellos, el legendario Lucifer, Lug o Luzbel, planteó que el problema se había generado por haberle dado demasiada información y facilitado demasiado rápido el acceso al conocimiento a los seres del Universo Material.
El error había sido precisamente que se les había instruido de acuerdo a la mentalidad de estos seres del Universo Mental, haciéndolos muy mentales, dejando de lado las emociones y los sentimientos neutralizando rápidamente la posibilidad de oposición y de resistencia para crear una dinámica de avance, lo cual produjo estancamiento e hizo que ninguna civilización alcanzara la séptima dimensión de la conciencia. El séptimo vehículo que todos tenemos es la Esencia. Entonces, para llegar a tener contacto con la Esencia, con el plano de la conciencia espiritual y con la séptima dimensión, se tendría que acceder a través de una actitud muy espiritual que no la habían podido enseñar los seres del Universo Mental por ser como dijimos, ellos muy mentales. Más bien esta conexión con los espiritual la tendrían que aprender los Seres del Universo Mental de los Seres del Universo Material, y en consecuencia los que avanzaron mucho y se estancaron (civilizaciones alienígenas), lo tendrían que aprender de nosotros, porque no hay nadie por muy sabio que sea que no tenga algo que aprender, y nadie por muy humilde que sea que no tenga algo que enseñar.
Haber recibido directamente el conocimiento pleno de las Leyes Universales, y abundante información complementario, volvió a ciertas civilizaciones del Universo Material, como los oriones, pleyadianos, sirianos, etc., muy apegados al esquema científico, avance tecnológico y filosófico que habían conseguido, al punto de volverse intolerantes (agresivos y violentos) si se sentían amenazados, tanto ellos como sus principios o sus logros científicos; este excesivo celo, sería más tarde el caldo de cultivo para que por temor al caos y a los cambios se generasen violentos enfrentamientos estelares o batallas cósmicas extraterrestres.
El Proyecto de Libre Albedrío
Sobre la base de todo esto, hubo quienes pensaron en experimentar con civilizaciones avanzadas variándoles las reglas de juego y así retomar la dinámica, otros consideraban que eso era inconveniente por lo que debía de hacerse con civilizaciones nuevas, sujetas a un patrón de evolución diferente o con variantes significativas. La idea era crear las condiciones para que surgiera una civilización con un potencial psíquico y espiritual que llegara a evolucionar impulsado por la fe, la esperanza y el amor, confiando en sus sentimientos e inspirado por sus emociones; una humanidad nueva que por mérito propio, aunque con conocimiento limitado, administrara y experimentara adecuadamente su libre albedrío y pudiese así alcanzar lo que sus hermanos mayores no consiguieron.
El Concilio de los Helell pensó que sería oportuno colocar un grupo de entidades mentales en el universo material que actuaran como entidades disociadoras, dificultando al máximo el acceso a información creando con ello resistencia para generar mérito puliendo el avance. Estas entidades, llamadas «demonios», que no eran ni buenas ni malas, vendrían a hacer su trabajo: ocultar la información, dificultar el avance, enfrentar, dividir, engañar y confundir. La idea era complicar las cosas al máximo, porque a mayor complicación, habría mayor esfuerzo por parte de las civilizaciones materiales por buscar y encontrarse a sí mismas, esto reestablecer la dinámica evolutiva. Como decíamos hubo seres del Universo Mental que consideraron que era muy peligroso e inconveniente cambiar las reglas del juego a aquellas civilizaciones ya desarrolladas y avanzadas bajo un patrón clásico. En un ejemplo sencillo, esto era como si en un partido de una final en un mundial de futbol, cuando ya falta poco para que termine el juego, como no hay goles y se nota el juego estancado, el árbitro decide que a partir de ese momento no haya el fuera de juego (off-side) o decide que se juegue sin arqueros. O como en el caso de un alumno de una escuela militar, que estudió todos los años de su formación bajo una disciplina rígida, internado, en una escuela que no era mixta, y que faltando un año para graduarse lo sacamos de ahí y lo mandamos a un colegio mixto, que no es internado, que no tiene nada de disciplina. Lo más probable es que naufrague.
Si se han de cambiar las reglas del juego, y se ha de experimentar buscando alternativas nuevas, se debía de experimentar sobre civilizaciones nuevas que todavía no habían surgido o que recién habían comenzado. Eso fue lo que sugirieron otros seres del Universo Mental, pero a Lucifer o Luzbel no le satisfizo esta modificación o contrapropuesta, porque significaba dejar de lado a sus entenados; a aquellos que habían recibido la instrucción de parte de ellos, para darle la oportunidad a unos advenedizos, a civilizaciones nuevas, para que de pronto, en muy poco tiempo estas alcanzaran niveles de evolución muy elevados que no solamente se equipararían a los alcanzados por los que ellos habían entrenado, sino, que incluso podrían superarlos. La inconformidad y desazón provocada en una entidad tan elevada, comenzó a producir una imprevista influencia nefasta e impensable intervención acompañada de una actitud negativa en Lucifer. Fue él afectado de alguna forma por las pasiones y emociones del Universo Material, desestabilizándolo y polarizándolo hacia un comportamiento intolerante y arbitrario
La Rebelión de Luzbel
Resumiendo: Las primeras civilizaciones que surgieron en ésta última creación fueron guiadas directamente por los seres ultraterrestres, produciéndose con ello un avance muy rápido y auspicioso, llevando a aquellas primeras civilizaciones o civilizaciones madre que florecieron, a pasar pronto de una tercera a una cuarta dimensión de conciencia, y luego continuar hacia una quinta y luego una sexta. Las que iban por delante ayudaban a las que surgían nuevas, en una larga cadena de solidaridad y apoyo mutuo.
Los seres del Universo Mental no tienen una evolución como la nuestra, por cuanto ellos fueron creados en la condición en que se encuentran, como seres muy mentales; y dependerá mucho de lo que ellos sean capaces de lograr con nosotros y a través nuestro para que esto afecte su evolución. Esto es que el universo mental creó al material como para que en la medida que los seres del universo material evolucionen, empujemos a los ultraterrestres a reconectar con el Universo Espiritual, que es el origen de todo y de todos.
Los seres ultraterrestres son seres mentales, de tal manera que todo en ellos pasa por lo racional, y poseen el conocimiento de donde viene todo y hacia donde se dirige. Esto los obliga a no desviarse ni a derecha ni a izquierda, limitando su libre albedrío, pero no los imposibilita a cometer errores, mas aún cuando entran en contacto con el Universo Material donde la dimensión de las emociones puede influirles pudiéndoles hacerles perder la perspectiva.
Las primeras civilizaciones que se desarrollaron en ésta última creación, recibieron mucho en poco tiempo, por lo que en su avance y colaboración con otros llegaron a un punto que para sobrevivir a las rivalidades, a la influencia de las pasiones y tensiones de todo tipo generadas por las emociones, procuraron neutralizar dichas emociones llegando a ser más mentales que sus propios mentores; por lo que se estancaron evolutivamente. Y en un universo dinámico como es el nuestro, el estancamiento es sinónimo de muerte.
Esto obligo a los seres ultraterrestres a participar de una suerte de Concilio Cósmico para evaluar los orígenes del problema y procurar las correcciones necesarias. Entre los asistentes al Concilio se hallaba uno de los más famosos Padres Creadores, Lucifer, Lug o Luzbel. Otro de los asistentes al cónclave fue Miguel o Michael.
Lucifer lo tenía muy claro. El consideraba que el error que se había cometido y que había provocado el estancamiento de las civilizaciones más avanzadas, haciéndoles llegar hasta una sexta dimensión de conciencia, pero no más allá y que había frenado al resto dejándolas en dimensiones inferiores, era consecuencia de haberles facilitado demasiado las cosas, permitiéndoles acceder al conocimiento sin mayor esfuerzo o dificultad. Había que devolverle a la creación su dinámica, por lo que sugirió introducir en el Universo Material entidades disociadoras que entorpecieran y obstaculizaran al máximo el proceso evolutivo presionando el aspecto de las emociones para darle mérito y devolverle la dinámica interrumpida.
Los demás seres ultraterrestres estuvieron de acuerdo que había que hacerse algo para corregir el estancamiento, pero no así con cambiar las reglas de juego y experimentar nuevas alternativas con aquellas civilizaciones que ya tenían un camino caminado, por cuanto podría ser malinterpretado por ellas.
Por su lado Lucifer se opuso en todo momento a que se experimentara con civilizaciones nuevas, que recién se estaban iniciando o que todavía no habían empezado, porque era como encumbrar a unos novatos por encima de sus entenados.
Se llegó entonces a una solución que podríamos llamar salomónica, esto es, se decidió experimentar sobre civilizaciones y mundos que no tenían futuro alguno, que se habían destruido totalmente y de manera natural en el proceso de la evolución. Así, si el proyecto fracasaba no importaba por cuanto originalmente aquellos mundos no tenían oportunidad, y si el proyecto funcionaba y llegaba a surgir allí una civilización con un potencial psíquico y espiritual superior capaz de inspirar nuevos horizontes, esto ocurriría en un tiempo alternativo, al margen del real tiempo del universo. En todo momento el experimento se mantendría aislado pudiendo ser abortado o terminado en cualquier momento. Pero aún esta opción no fue bien recibida por Lucifer, que de mala manera mantuvo un monitoreo muy estricto de todo el proceso.
Se decidió entonces escoger ocho planetas de categoría “UR”(planetas de aura azul, predestinados para un desarrollo espiritual superior siempre que sobrevivieran a su inestabilidad, por ser ellos planetas muy inestables que fácilmente entran en convulsión y se destruyen, o atraen impactos meteóricos o de cometas que tanto los pueden destruir como sembrar o alterar la vida en ellos ), dos por galaxia, involucrando en total cuatro galaxias de un grupo local de galaxias que gira en torno a la M31 la gran nebulosa de Andrómeda. Los planetas escogidos ya se habían destruido y no existían en el Real Tiempo. Uno de esos planetas era la Tierra.
Se autorizó entonces que un grupo de civilizaciones extraterrestres viajaran a través del tiempo y del espacio mediante atajos interdimensionales (pliegues cósmicos o agujeros de gusano), llegando a los planetas escogidos antes de que estos murieran e impidiendo que sucumbieran, creando con ello un tiempo alternativo paradójico.
Para los extraterrestres el tiempo en el universo es como una espiral ascendente, de tal manera que en una de las curvas de la espiral la Tierra murió, pero el universo continuó. Fue precisamente hace mil doscientos millones de años que nuestro planeta fue víctima de impactos de lluvia meteórica que acabaron con la vida del planeta y con el planeta. Entonces a través de los portales dimensionales abiertos llegaron los interventores (Ingenieros Genéticos o Sembradores de Vida) viajando por el espacio tiempo, llegando a nuestro mundo antes que sucumbiera creando otra realidad, y a partir de ese momento se crea otro tiempo que corre paralelo al anterior. Supuestamente al ser éste, un tiempo paradójico, se suponía que debía ser irreconciliable con el tiempo real, pero los acontecimientos demostrarían lo contrario.
Ahora, ¿qué prueba científica habría de que esto que estamos diciendo podría ser real? Precisamente, cuando los científicos procuran datar la antigüedad del universo utilizan para ello el llamado “Efecto Dopler”, que es el corrimiento de la luz hacia el rojo del espectro, y que permite medir la velocidad con la que las galaxias se acercan y se alejan entre sí. De acuerdo a esto, se ha calculado que el universo tendría 13,500 millones de años de antigüedad. Pero lo que los científicos no se pueden explicar, es por qué cuando ellos miran en determinada dirección del universo, siempre se encuentran con ciertas estrellas más antiguas que el “Big Bang”, lo cual es imposible. No puede haber estrellas más antiguas que la creación. Un ejemplo reciente de esto es el caso del descubrimiento por parte del telescopio espacial Hubble el 15 de Agosto del 2011 de una nebulosa en forma de collar de diamantes en la Constelación de Sagitta a una distancia de 15,000 años luz. Esto es, más allá de la creación. Otro elemento interesante de apoyo a éste planteamiento es que en el año 2002, cuando la sonda espacial Voyager debía de salir fuera del sistema solar para buscar vida en otros mundos fuera del sistema, cuando dirigió sus cámaras y detectores en dirección hacia la Tierra no detectó vida en nuestro mundo. Fue un escándalo porque ¿cómo podría buscar vida en otros mundos si ni siquiera la detectaba en la Tierra? Lo que ocurrió es que la sonda había pasado muy cerca de las lunas de Júpiter, donde habría un portal dimensional que comunicaría con el Real Tiempo del Universo, y dentro del Real Tiempo no había vida en la Tierra, ni siquiera habría Tierra.
Frente a la actitud de Lucifer nos preguntamos y con razón, ¿cómo seres del Universo Mental, de una dimensión tan elevada, con una perspectiva tan amplia de todo, podrían caer en ese juego de la soberbia y de falta de humildad?
Pues cuando uno está más alto, difícilmente se cae porque busca sujetarse de todo. Pero si se cae, se cae más profundo y más violentamente. Así, a Lucifer no le satisfizo la contrapropuesta y no le agradó de ninguna manera que se llevara a cabo. Al rebelarse contra lo que se estableció, Luzbel se distanció del Plan propuesto por los otros e inició una campaña de boicot sistemático del “Plan Cósmico”, convirtiéndose sin quererlo en uno de esos agentes disociadores o «demonios» que se procuraron para generar las trabas y la tensión que dificultara el acceso a la información para las nuevas civilizaciones, que se introdujeron como alternativa de evolución.
La rebelión de Luzbel o Lucifer ante la decisión final del Concilio de los Helell, llevaría a «El que porta la Luz», a influenciar a civilizaciones extraterrestres del Universo Material predisponiéndolas en contra del Plan Cósmico y, como consecuencia, en contra de cada uno de los planetas involucrados así como de la nuevas civilizaciones que muy pronto aparecerían…
Lo encontre demasiado veridico y calza perfectamentente con lo que ocurre hoy en dia.
Yo pase por un accidente y me doy cuenta que mientras mas se golpea uno, mas entiendes lo que es conectarse con la esencia.